Ya sabemos que desde los primeros niveles de escolaridad nos hablan de los tipos textos que existen y qué funciones cumplen, pero en una era en la que los medios digitales han tomado una mayor fuerza y cada vez más gente se dedica a crear contenidos, es necesario traer nuevamente a colación este tema.
Y no sólo para aquellos que redactan artículos o entradas para un blog, pues realmente todo el proceso de marketing exige que las personas que están a cargo utilicen todo tipo de textos durante las diferentes etapas, aunque a veces ni siquiera sean conscientes de ello.
Por ejemplo, para promocionar un producto, tienes que hacer uso de un texto descriptivo, es decir, enumerar características del producto (las más relevantes) para crear, posteriormente, un texto publicitario. Pero vayamos poco a poco.
Existen más de diez tipos de textos y aquí te diremos brevemente de qué va cada uno, cuáles son algunas de sus características y para qué sirve, con el fin de que puedas sacarle el mayor provecho cuando necesites hacer uso de él para crear cualquier tipo de contenido.
Los diferentes tipos de textos
Veamos 14 tipos de textos a detalle.
1. Textos Expositivos
El propósito principal de un texto expositivo es informar. En este tipo de texto el autor no da una opinión personal sobre un tema, sino que únicamente explica lo que otra persona dice sobre un tema o da datos duros sobre el mismo.
El texto expositivo sirve para lograr cierta autoridad; se puede hacer a través de una cita o una referencia, que son fundamentales en una tesis, por ejemplo. También se recurre mucho a este en los libros de texto de la escuela, pues suelen incluir definiciones.
Los textos expositivos, a su vez, pueden dividirse en dos tipos, dependiendo de qué tan complejo sea el contenido y del nivel de comprensión que exija:
De carácter divulgativo
Están hechos para un público amplio, es decir, no se precisa de un conocimiento previo para comprender perfectamente la información que se brinda y se emplea un vocabulario accesible. Algunos ejemplos son las enciclopedias, textos escolares, artículos periodísticos, folletos, trípticos, etcétera.
De carácter especializado
Estos, como su nombre lo dice, están destinados para especialistas en un área. Los textos suelen emplear términos técnicos que no cualquiera puede comprender, por lo que se requiere de cierto conocimiento previo.
Algunos ejemplos de textos expositivos de carácter especializado son las tesis, los artículos científicos, jurídicos, etcétera.
2. Textos Argumentativos
El texto argumentativo es muy útil cuando se busca persuadir a las personas.
A través de este, se defiende o rechaza una idea, un proyecto o un pensamiento en general, pero siempre por medio de razonamientos.
El objetivo es tratar de convencer a la otra persona de que los argumentos de quien escribe son los más valiosos y, por lo tanto, es quien tiene la razón.
Este tipo de texto está muy relacionado con la publicidad porque su intención es convencer, persuadir y aconsejar a alguien sobre qué le conviene y por qué, pero no tenemos que ir muy lejos para verlo en acción: en la mayoría de las conversaciones que escuchamos en la calle se utiliza el texto argumentativo.
Los argumentos pueden ser:
- Analógicos: comparar casos parecidos para defender una teoría o postura
- De autoridad: recurrir a una figura o eminencia del sector que apoye nuestra postura
- De presunción: se busca no aprobar nuestra teoría, sino reprobar la contraria. Se utiliza mucho en el tema legal
3. Textos Descriptivos
Como señala su nombre, la función de este tipo de textos es enumerar las características de un objeto, una persona, un animal, una situación, un producto, un servicio o cualquier otra cosa, tangible o intangible, para describirlo.
El texto descriptivo, dentro del marketing, sirve para transmitir de forma rápida y sencilla la utilidad de un producto, así como dar a conocer algunos de sus atributos más destacados.
Debido al propio fin de estos textos, existe una abundancia de adjetivos calificativos y se puede recurrir a algunas licencias lingüísticas, como utilizar las hipérboles (se trata de aumentar o disminuir de forma exagerada lo que se dice).
Sus funciones principales son definir, explicar e incitar a los lectores, pero por medio de la objetividad. Asimismo, debe prevalecer un orden lógico dentro de este tipo de texto.
Existen dos tipos:
- Descriptivo-técnico: se caracteriza por hacer énfasis en la exactitud de los datos
- Descriptivo literario: las descripciones surgen de un punto de vista personal y el autor es quien decide la intencionalidad
4. Textos Científicos
Es uno de los más importante y está relacionado con la autoridad.
Por medio de los textos científicos, se aportan pruebas y resultados sobre un objeto de estudio, con la finalidad de argumentar, defender y demostrar una o varias hipótesis.
Aquí no tienen cabida las opiniones o expresiones subjetivas; todo tiene que basarse en argumentos y se debe incluir elementos que los sustenten, como encuestas, estadísticas, estudios, informes, entre otros.
Quienes redactan un texto científico deben poner especial cuidado en que las palabras o los términos que empleen sean unívocos, es decir, que sólo tengan un significado, que no se presten a interpretaciones.
5. Textos Instructivos
Se enfocan a dar instrucciones para que la gente aprenda a realizar algo.
Algunos de los más populares son los tutoriales paso a paso, los manuales y las recetas.
Estos textos brindan toda la información necesaria para que las personas comprendan el funcionamiento de distintos dispositivos o sepan cómo se pueden realizar determinadas acciones.
El objetivo es que, de manera didáctica y pedagógica, se guíe a los usuarios durante determinada tarea para que este pueda aplicar los conocimientos adquiridos para llevarla a cabo por sí mismo.
Su estructura comprende dos partes: establecer el objetivo y el apartado donde irán las instrucciones.
Por la finalidad que persigue, se redacta en modo imperativo, por ejemplo: mezcle todos los ingredientes; una la pieza 1 y 2 con los tornillos, etcétera.
6. Textos Narrativos
Son utilizados para contar una historia que se desarrolla en un periodo y lugar determinados. Esta debe tener una secuencia de acciones que realicen los personajes.
Los personajes, las situaciones y los lugares pueden ser reales o ficticios y el narrador de la historia puede o no ser el mismo autor. El narrador será quien le cuente al lector el relato, en cualquier persona gramatical (primera, segunda o tercera).
Quizás es el texto con el que más familiarizados estamos, debido a que cada día solemos utilizarlo cuando contamos algún hecho o situación que vivimos durante el día; los seres humanos somos narradores y creadores de textos natos.
7. Jurídicos
Se emplean en el ámbito jurídico y poseen una estructura rígida, plagada de tecnicismos y lenguaje arcaico, por lo que resulta casi imposible que una persona que no sea especialista en esta área pueda comprender este tipo de textos.
Su tono es siempre formal y el contenido es objetivo porque se busca que el material nunca se preste a interpretaciones ambiguas.
Se redactan desde la impersonalidad, es decir, utilizando la tercera persona gramatical (él/ellos) y para que tengan validez deben apegarse a una serie de normas que regulan su actividad.
Algunos ejemplos son los dictámenes, las disposiciones, las normativas, las regulaciones, etcétera.
8. Administrativos
Los textos administrativos son muy similares a los jurídicos, pero la diferencia es que tienden a ser menos rígidos que los jurídicos. Por ejemplo, aquí entran los certificados.
Los elementos que conforman un texto administrativo son el uso de membrete, que identifica a la institución que emite el documento; la colocación de la fecha y el lugar, que ayuda en la clasificación del archivo; fórmulas de tratamiento, a través de las cuales se reconoce el cargo del destinatario; cuerpo o desarrollo; despedida; y firma o rúbrica, que es la que permite identificar al emisor el documento.
A través de los textos administrativos es posible que los individuos y los grupos sociales establezcan una comunicación con organismos de la administración pública o privada, tanto fuera como dentro de una misma institución.
Por ejemplo, cuando se hace una solicitud para un cambio o baja de materia o de curso en la universidad y se presenta a la administración escolar para que inicie con el debido proceso.
9. Literarios
Son muy similares a los narrativos, pero la diferencia radica en que los literarios emplean formas estéticas, poéticas y lúdicas del lenguaje, pero ojo, esto no quiere decir que el contenido no importe; también tiene peso, ya que se debe buscar calidad.
En este se emplean recursos como figuras retóricas (metáforas, sinécdoques, etcétera) y permiten un uso libre del estilo y de la estructura, lo que ayuda a crear textos que transmitan emociones, conmuevan e impacten.
Quienes producen textos literarios buscan siempre innovar en las formas de expresión para ser más llamativos para los lectores.
Algunos ejemplos son: cuentos cortos, crónicas, fábulas, novelas, entre muchos otros.
10. Textos Humanísticos
Los textos humanísticos tratan temas relacionados con el ser humano y sus productos culturales.
En ellos se abordan disciplinas que pertenecen a las ciencias humanas (filosofía, lingüística, literatura, psicología, historia, etcétera) y a las ciencias sociales (sociología, economía, política, etcétera).
Los primeros no persiguen un fin práctico inmediato sino formativo, es decir, transmitir ideas sobre aspectos humanos o culturales que inviten a hacer una reflexión sobre estas, por esto mismo, uno de los rasgos característicos es que son subjetivos, lo que se presta para que se abran debates.
En el caso de las ciencias sociales, persiguen un fin teórico y especulativo. La reflexión y el razonamiento tienen una carga argumentativa.
Debido a que la intención comunicativa de este tipo de textos es transmitir conocimientos, las funciones lingüísticas que prevalecen son la referencial (se utiliza el lenguaje para reproducir la realidad) y la apelativa (se pide al lector que intente comprender lo que se plantea).
Pero también suele emplearse la metalingüística (para explicar conceptos propios de una disciplina); la expresiva (para dar opiniones o hablar de creencias) y la poética (para darle un fin estético al texto).
11. Textos Periodísticos
Este tipo de textos hace referencia a un escrito que se construye, evidentemente, por medio de un ejercicio de periodismo o de comunicación social.
Su propósito es informar al lector acerca de un evento o un hecho que pueda resultar de interés para el público en general, pero este suceso debe ser reciente, pues con el paso del tiempo pierde vigencia, cosa que no sucede con los textos literarios.
Si bien se deben tratar siempre temas actuales, esto no sólo se determina por el momento en que ocurre un hecho, sino que depende de varios factores (cercanía, factores políticos, económicos y sociales, la fama de los protagonistas, la conflictividad o lo inusual, etcétera).
Los textos periodísticos suelen imprimirse o distribuirse de forma masiva, ya que perderán relevancia en la medida en la que pase el tiempo.
Seguirán disponibles en la red, pero no tendrán gran repercusión en búsquedas posteriormente, sino sobre todo cuando suceden, a menos que surja una actualización relevante.
Algunas de sus características son las siguientes:
- Heterogéneos: la temática puede ser muy variada (política, economía, deportes, farándula, cultura, nacional, internacional, etcétera)
- Colectivos: quien participa no es sólo el periodista, sino que hay varias personas más detrás del proceso de publicación
- Versátiles: pueden publicarse tanto en medios impresos como en medios digitales
En estos prevalecen los determinantes demostrativos (este, estos, esta, estas, esto, eso, ese, esas, aquel, aquellos, aquella, aquellas) y posesivos, así como el tiempo verbal pretérito perfecto simple del indicativo y los predicados transitivos.
12. Textos Publicitarios
Los textos publicitarios son aquellos que tienen como objetivo difundir información acerca de una marca, un producto o un servicio.
A través de este, se intenta llamar la atención de las personas y persuadirlas para que realicen determinada acción; esta no necesariamente debe ser que adquieran un producto o servicio.
Una de las ventajas es que puede llegar a muchos usuarios, debido a cómo se distribuye, lo que permite generar muchas oportunidades de venta.
Existen dos tipos de textos publicitarios:
Argumentativos-descriptivos
Se parte de un argumento para tratar de convencer a los usuarios de algo. Generalmente, se utilizan las descripciones para hablar sobre los atributos más destacados del producto para reforzar la argumentación.
Narrativos
Son útiles cuando las empresas o los negocios se inclinan más por apelar al lado emocional de las personas.
A través de una historia bien desarrollada, se busca conectar con el usuario evocando sentimientos y emociones.
En los textos publicitarios, las funciones lingüísticas que entran en juego son la fática (intenta conectar con interlocutor y abrir un canal de comunicación); metalingüística (el mensaje elige otro mensaje para hablar del objeto); poética (se le da un tratamiento retórico para llamar la atención de los usuarios de una manera estética).
13. Textos Digitales
Este tipo de textos son contenidos escritos y difundidos a través, efectivamente, de medios digitales.
Por medio de ellos, se busca informar, comunicar, expresar, promocionar o dar a conocer un objeto, un evento, una situación, un hecho, etcétera.
Comprende un público mucho más extenso, debido a que su distribución es más sencilla y puede llegar de forma rápida a distintos lugares, países, continentes, y permite emplear un mayor número de recursos. Esta es precisamente la diferencia entre los textos digitales y los tradicionales.
Otra de sus ventajas es que permiten la actualización. Tú puedes escribir un texto y, si a los dos días o a los cinco meses quieres modificar la información, puedes hacerlo de una manera fácil y rápida y los lectores podrán ver los cambios de manera automática.
Asimismo, se caracterizan por poder producirse de manera rápida y por ser de fácil distribución.
Algunos ejemplos son los mails, los chats, los ebooks, las entradas de un blog, los newsletters, las revistas, etcétera.
14. Textos Históricos
Los textos históricos se emplean para contar una serie de sucesos relevantes ocurridos en el pasado.
En estos se deben evitar los comentarios subjetivos; únicamente se trata de dar a conocer qué pasó en un tiempo determinado, siempre con bases bien fundamentadas. Generalmente, se recurre a documentos.
En los textos históricos es muy importante que exista un orden cronológico. No tiene ningún sentido, por ejemplo, hablar de un hecho que sucedió en 1980, después contar un evento de 1850 y cerrar con uno de 2017. Esto no sería nada profesional y le quitaría todo valor al escrito.
Por lo anterior, también se requiere que sea un profesional quien redacte los textos históricos, para que las fechas y los hechos, que son fundamentales en este tipo de textos, sean veraces.
Conclusiones
Conocer todos los tipos de textos que existen y sus funciones te permitirá identificar de una manera sencilla cuál o cuáles de ellos se adaptan mejor a la estrategia que estás empleando y a tus objetivos.
Escribir puede ser verdaderamente apasionante y ampliar tus conocimientos y recursos como escritor nunca viene mal, ¿no es cierto? Al contrario, es muy importante seguir creciendo y nutriéndose como creador de contenido para hacer un mejor uso de cada uno de los textos y sacarles el mayor provecho.
Deja un comentario... ¿tú qué tipo de textos has empleado para lograr resultados? ¿agregarías algún otro a esta lista? ¿te gustaría que profundizáramos en alguno en específico? De ser así, ¿en cuál?
